La austeridad no siempre es la solución
Escogí hacer la reseña del libro ¡Acabad con esta crisis! de Paul Krugman por dos razones principales. La primera es su título, que me llamó la atención des de un primer momento al ser tan exclamativo, algo no muy usual entre libros académicos y de tono más formal como es su caso.
Por otra parte, me interesaba saber la opinión de un economista galardonado con el Premio Nobel como es Paul Krugman. Concretamente, su punto de vista y análisis sobre la crisis económica que empezó el año 2008 y sobre la que incide especialmente este libro.
En primer lugar, des de mi punto de vista el autor acierta planteando la pregunta clave que todos nos hacemos en formato “Y ahora, ¿qué hacemos?” Y no tanto “¿Cómo ha pasado esto?”. Esto lo justifico así en el sentido que, revisando la bibliografía escrita sobre la crisis económica de 2008, la mayoría de autores centran el contenido de sus artículos y libros en la segunda pregunta mencionada, y no en la primera. Krugman, en cambio, modifica la pregunta a mi parecer correctamente y pone el foco sobre qué tenemos que hacer para salir del “lío” en el cual nos hemos metido o nos han metido algunos.
Un ejemplo claro de esta explicación sería la reseña anteriormente hecha de libro “La cultura de la codicia”, que, sin dejar de ser apropiado, nos explica con todo detalle las razones por las cuales empezó la crisis y quién fue el responsable, y no tanto las posibles soluciones a esta.
Para hacer una visión general del conjunto del libro, uno de los puntos negativos que se podría destacar es que la gran mayoría de sus capítulos se centran exclusivamente en Estados Unidos. Bien es cierto que Krugman es estadounidense y que la crisis empezó en su país de nacimiento, pero también se agradecería una perspectiva más europea occidental donde también causó y está causando serios problemas la rescisión económica. Dicho esto, el análisis en conjunto de la situación me parece impecable, siendo muy detallado y exhaustivo.
La trampa de liquidez; un concepto a destacar
Es importante remarcar que, de manera clara y, des de mi punto de vista, transparente, el autor deja ver las líneas de pensamiento más importantes del libro ya en el capítulo 2.
En primer lugar, Krugman tiende a una inclinación hacia las teorías keynesianas, es decir, incrementar la demanda y aumentar el dinero disponible con un interés el más bajo posible, muy cercano incluso a cero. Sin embargo, el autor cree que estas medidas del economista Keynes no podrían ser tan efectivas en la actualidad como consecuencia de las trampas de liquidez. Este concepto me llamó la atención leyendo el libro y lo he querido destacar, ya que me parece muy acertado y revelador de la situación actual que vivimos. Estas trampas de liquidez hacen referencia a que, cuando la tendencia masiva de la población es ahorrar, no sirve rebajar el interés a prácticamente el cero ya que nadie va a pedir créditos y las empresas no van a invertir. En consonancia con lo dicho anteriormente, una señal que creo que puede demostrar la recuperación de la economía sería la noticia que se conoció en junio de 2017, donde se supo que el volumen total de crédito a empresas y familias había aumentado en 6000 millones, un incremento leve pero significativo.
Por otra parte, y siguiendo con el análisis del libro, estoy de acuerdo con el autor que se trata de una crisis de demanda, pero también añadiría que existe un problema muy importante de oferta, sobre todo en lo referente a su calidad y no tanto a su cantidad. Se ofrecen puestos de trabajo, pero estos suelen ser temporales y con unos requisitos sobre cualificados, y eso no contribuye a la mejora de la ocupación ni a incrementar el número de asalariados.
Soluciones para salir de esta situación
Una de las partes que más me ha hecho reflexionar de este libro ha sido las soluciones que él propone para conseguir superar esta rescisión económica. A mi parecer, todas ellas son acertadas y están expuestas de forma muy clara a lo largo del libro.
Cabe destacar que, aunque culpa a los políticos de cometer los mismos errores del pasado e implementar medidas erróneas, su visión del futuro es bastante positiva, insistiendo en que tenemos en nuestras manos los instrumentos y herramientas para cambiar la situación, creando más empleo y demanda y revirtiendo la situación en la cual nos encontramos. Aunque tal y como dice el título del libro, se tiene que acabar lo antes posible con la recisión antes de que se vuelva crónica.
Como conclusiones finales, la obra me ha parecido en líneas generales amena, aunque haya algún fragmento de algún capítulo que puede hacerse denso para los que la economía es una completa desconocida. No obstante, el estilo de Krugman es entendible y sencillo, explicando todos los conceptos que pueden no quedar claros al lector. Quizás he echado en falta más análisis internacional y no tanto de Estados Unidos, pero su visión de la crisis económica es, des de mi punto de vista, muy clarificadora e invita a reflexionar sobre que hemos estado haciendo mal hasta ahora.
